POLINYÀ.
Es mi pueblo, Polinyà
verde vergel ribereño,
si ud. Viene… volverá
considerándose dueño
Paseará por sus calles
tan llanas como un billar
que así quiso Dios crear
El rio Xúquer lo baña
linda en sus mismas paredes
no tan fácil tendrá España
un pueblo con más laureles
Llanura de naranjales,
cítricos como bombones
flor de azahar son las verdades,
manjar de miel y pasiones
Magnífico ayuntamiento,
el paseo Colón,
palmeras que dobla el viento
ficus de aparte mención.
Su iglesia parroquial
es digna de admirar,
destellos de catedral
(…)
Ermita a san Sebastián,
fiesta y feria en su día
al mártir y capitán
nuestro patrón de por vida.
La casa de la cultura,
biblioteca bien cuidada,
una sociedad augura
banda musical laureada.
Polideportivo, piscinas,
amplia terraza y bar,
paellas o lo que pidas
estancia a no olvidar.
Es un placer en verano
visitar este recinto
tenis, básquet, balonmano
o degustar en la terraza
un aperitivo con Cinzano
cómodo como en tu casa.
Agua depurada,
decoro en la instalación,
rodeada de pinada
buen aspecto en atención.
Fiestas de Agosto de altura
retreta monumental,
mil disfraces con primura
superior a un carnaval.
No falta ofrenda de flores,
la belleza es elocuente
a sus santos son fervores
de juventud que siente.
Presentación de las reinas
belleza, luz y colores
Majestades de las fiestas,
guirnalda de paz y flores.
Truenos, “Cordaes” y tracas,
pasacalles musicales
espectáculos de masas
castillos artificiales.
Exhibición de carcasas
alegría a raudales
orquestras, bailes en las plazas,
dulzaineros y timbales.
Procesiones religiosas,
grandes cenas populares,
comisiones laboriosas,
paellas monumentales.
Invitación a diario,
en el casal al afecto
de los clavarios del barrio
con licores y refrescos.
Día 6 fiesta mayor:
cabalgata, castillo en tecnicolor…
Y en la procesión al Cristo
el silencio nunca visto.
Y llegó el 7 de agosto
entierro de la cazalla,
no tomarás vino o mosto,
la participación estalla.
Viste de negro, llora o calla,
únete al humero que raya
la movida más extraña.
Las fiestas así despiden
lamentando que terminen.
Lo dicho al empezar…
repito al terminar.
Es mi pueblo Polinyà,
verde vergel ribereño,
si ud. Viene volverá
considerándose dueño.
Juan Bautista Hidalgo Gausach
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